Educación Financiera

¿Cuáles son las ventajas de pagar con una tarjeta de crédito tus compras?

¿Alguna vez has pagado con una tarjeta de crédito? Si es así, probablemente ya hayas disfrutado de una de sus ventajas principales: la flexibilidad en los cobros. Sin embargo, esta es solo una de las muchas que posee, ¿sabes cuáles son? Si te apetece conocerlas, te animamos a que continúes leyendo este artículo. Encontrarás información de gran interés. ¡Vamos allá!

¿QUÉ ES EXACTAMENTE UNA TARJETA DE CRÉDITO Y CÓMO FUNCIONA?

¿Sabes qué mecanismo estás utilizando al pagar con tu tarjeta de crédito? Para dar respuesta a esta pregunta, es preciso partir del principio. Una tarjeta de este tipo funciona como una identificación. Dentro del plástico de la tarjeta integra un microchip y unos números en relieve, que la individualizan.

Al utilizarla, el comercio en cuestión se pone en comunicación con la entidad emisora de esa tarjeta. Con los datos identificativos del microchip o de los números (según el caso) se solicita una cantidad de dinero. Si los datos son correctos y la cantidad es aceptada por los límites de la tarjeta, la entidad realiza el pago.

En este sentido, quien paga no eres tú, aunque la tarjeta sea tuya, sino que el importe es abonado por la entidad emisora del servicio. Sin embargo, como contrapartida, pasa a generarse una deuda por el importe prestado al que, dependiendo del caso, se le sumarán o no los intereses.

Existen varias maneras de hacerte cargo de tal deuda, bien abonándola íntegramente a final de mes, o bien a plazos durante un periodo previamente pactado con la entidad. Todo depende de las opciones que hayas elegido con anterioridad.
 

¿QUÉ ALTERNATIVAS EXISTEN A PAGAR CON TU TARJETA DE CRÉDITO?

De lo que te hemos comentado en el apartado anterior, puedes ver que, al pagar compras online con tu tarjeta de crédito, lo que estás haciendo es obtener financiación. Dicho de otra manera, consigues un préstamo rápido e inmediato de la mano de la entidad emisora para que puedas comprar lo que deseas.

Frente a este funcionamiento, en la actualidad existen otros medios de pago también muy populares. Entre ellos, por ejemplo, está la tarjeta de débito. Esta funciona como una llave para acceder a tu cuenta corriente, de donde extrae el dinero. Todo el importe se te cobra directamente, por lo que dependes de tu saldo.

Además de este medio, existe el pago en efectivo, que todos conocemos. Es un medio bastante parecido al pago a débito, ya que consiste en la entrega de un dinero que ya se posee previamente. La diferencia reside en el hecho de utilizar medios electrónicos o físicos.
 

LAS VENTAJAS DE PAGAR TUS COMPRAS CON TU TARJETA DE CRÉDITO

De lo comentado en el apartado anterior puedes concluir que el pago a crédito es de naturaleza muy distinta al pago de débito o en efectivo. En este sentido, precisamente de su particular modo de operar provienen los beneficios y ventajas que presenta. Entre otras muchas, la acción de, por ejemplo, solicitar una tarjeta como la de Carrefour PASS y utilizarla para pagar a crédito te permite disfrutar de las 4 ventajas que te explicamos en las próximas líneas.
 

1. Consigues financiación rápida


Este es el beneficio principal y el más evidente de todos. Imagina que estás a 5 días de cobrar tu nómina, pero necesitas hacer una compra para la que no dispones de la liquidez suficiente. Con una tarjeta como esta no tienes de qué preocuparte. Puedes realizar la adquisición ahora mismo, y ya harás frente a su pago efectivo cuando hayas cobrado.

Consiste, por tanto, en una vía rápida de acceso a financiación inmediata. A su vez, muchas veces también se puede hacer disposición del efectivo, por lo que ni siquiera es preciso que recurras a ella para flexibilizar las compras.
 

2. Tienes servicios adicionales


Otra de las ventajas de pagar con tu tarjeta de crédito es que puedes acceder a una enorme cantidad de servicios adicionales, que van más allá de la financiación rápida y de la flexibilización de los pagos. Muchas de ellas ofrecen, por ejemplo, seguros de viaje o de robo. Otras, ponen a tu disposición medidas como el cashback.

El cashback es un servicio de devolución de un porcentaje de tus compras de manera automática. Su finalidad es que puedas aprovechar más tarde ese saldo a tu favor. Podría equipararse a una especie de descuento permanente para determinadas operaciones.
En el caso de la tarjeta Carrefour PASS este cashback consiste en la acumulación del 1% de las compras que realices tanto a débito como a crédito en el ChequeAhorro de Carrefour que luego podrás usar para las compras que hagas tanto en los hipermercados Carrefour como en carrefour.es.
 

3. Cuenta con aceptación mundial


Dado que las tarjetas de esta clase están ligadas a los servicios operativos de grandes compañías como Mastercard, son aceptadas en todo el mundo. Nos referimos tanto a comercios como a cajeros automáticos o terminales de pago virtual de toda clase.

No importa que viajes al extranjero, que realices compras en línea en tiendas asentadas en otro lugar o que precises obtener efectivo en otro país. Su aceptación es prácticamente total y absoluta, por lo que no habrás de temer no poder darle el uso deseado estés donde estés.
 

4. No suelen tener ningún coste


El modo en el que las entidades emisoras de la tarjeta reciben sus ingresos es mediante el cobro de intereses en caso de solicitar el pago a plazos. Como consecuencia de ello, como norma general, no precisan del cobro de comisiones de emisión o de mantenimiento de la tarjeta.

Así, puedes disfrutar de ella sin necesidad de estar preguntándote si verdaderamente te merece la pena asumir la comisión por mantenerla operativa. Bastará con que valores si, usándola mucho o poco, va a facilitarte la compra de bienes, gracias a la flexibilidad en el pago de los importes, sin mermar tus rutinas de compra.

En definitiva, ya conoces las principales ventajas de hacer uso de una tarjeta de crédito. Frente al resto de alternativas que te hemos mostrado, se trata de un medio de pago extraordinariamente útil. Eso sí, siempre ha de utilizarse siendo consciente de que se está asumiendo una deuda que, tarde o temprano, deberás saldar. Por tanto, exige que seas responsable para poder disfrutarla y sacarle provecho sin incurrir en más gastos de los que puedas asumir.