Seguridad y fraude

Suplantación de identidad. ¡Protégete contra ella!

Las amenazas a las que nos exponemos en el mundo digital son cada vez mayores, trasladamos gran parte de nuestra vida al entorno online, lo que nos expone a riesgos crecientes. Una de las amenazas más alarmantes y comunes es la suplantación de identidad, un delito que puede tener graves consecuencias financieras, reputacionales y legales.

¿Qué es la Identidad Digital?

La identidad digital es todo aquello que nos identifica en el entorno online y comprende tanto a los datos personales que utilizamos (nombre, correo, alias, contraseñas, etc.) como a la actividad que llevamos a cabo en el mundo digital (redes sociales, comentarios, blogs, fotos compartidas, etc.).

Dado que esta información digital puede encontrarse publicada en Internet, nuestra identidad digital podría ser robada por los ciberdelincuentes con el objetivo de hacerse pasar por nosotros y conseguir así algún tipo de beneficio a nuestra costa. Es lo que se conoce como suplantación de identidad.

 

Los ciberatacantes utilizan diferentes estrategias y técnicas para conseguir suplantar la identidad de una persona y cometer fraudes u obtener un beneficio en su nombre.

  1. Recopilación de datos personales y bancarios: A través de redes sociales, sitios web públicos u otras fuentes abiertas donde compartimos información sin ser conscientes de ello.

  2. Ataques de ingeniería social: Métodos como phishing (correos fraudulentos), smishing (mensajes de texto engañosos) o vishing (llamadas falsas), diseñados para obtener información sensible.

  3. Acceso no autorizado a cuentas reales: Mediante contraseñas robadas o débiles, los atacantes pueden tomar control de correos electrónicos, redes sociales o servicios financieros.

Con esta información, los ciberdelincuentes pueden realizar compras fraudulentas, enviar mensajes maliciosos en nuestro nombre o dañar nuestra reputación en línea.

 

Para entender el impacto de este delito, imagina tres posibles situaciones:

  1. Fraude financiero: Alguien utiliza tu tarjeta bancaria para realizar compras online.

  2. Uso indebido de tu correo electrónico: Un atacante envía mensajes desde tu cuenta para estafar a otros.

  3. Comentarios inapropiados en redes sociales: Se hacen publicaciones ofensivas desde un perfil que parece ser el tuyo.

 

El Abuso de Marca: Suplantación en el Mundo Corporativo

El impacto no se limita a individuos. Las empresas también enfrentan riesgos de que su identidad sea suplantada, mediante prácticas como:

  • Perfiles falsos en redes sociales: Los atacantes imitan marcas para engañar a clientes o dañar su reputación. Para ello, utilizan imágenes, colores y tipografías similares o iguales a la de la marca, aparentando de esta manera cierta credibilidad. También, pueden utilizar nombres de usuario parecidos.

  • Cybersquatting: Registro de dominios similares a los oficiales para realizar actividades fraudulentas.

Estas prácticas buscan obtener beneficios económicos, acceder a información confidencial o destruir la imagen de la marca.

Medidas para reducir el riesgo de la Suplantación de Identidad

1. Limita la Información que compartes.  Evita publicar datos sensibles como números de tarjetas, contraseñas, correos electrónicos, direcciones o nombres de familiares.

2. Mantente alerta Desconfía de mensajes, llamadas o correos sospechosos, especialmente aquellos que soliciten información personal o financiera. Siempre verifica la legitimidad de la fuente.

3. Mejora la seguridad de tus cuentas

  • Configura la privacidad adecuadamente: Ajusta las opciones de privacidad y seguridad en redes sociales y servicios online.

  • Usa contraseñas seguras: Crea combinaciones robustas, cámbialas regularmente y no las compartas.

  • Activa la verificación en dos pasos: Este mecanismo agrega una capa adicional de protección a tus cuentas.

4. Sé precavido en redes sociales No aceptes solicitudes de amistad de desconocidos y verifica la autenticidad de perfiles antes de interactuar.

¿Qué hacer si eres víctima?

  • Informa inmediatamente a las plataformas afectadas.

  • Cambia las contraseñas de tus cuentas.

  • denuncia el incidente a las autoridades competentes. El INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad) dispone de la Oficina de Seguridad del Internauta, donde se explica de forma clara y accesible cómo denunciar cualquier fraude telemático. Además, ofrece un número de teléfono para consultas.https://www.incibe.es/ciudadania/ayuda/denuncia

¡Y recuerda, seguridad somos todos!